Este film de 1971 dirigido por Sam Peckinpah le sirvió para hacerle reconocido como un director capaz de rodar una película "fuerte". La película cuenta con unas actuaciones geniales de Dustin Hoffman y Susan George.
La película trata de una pareja que se van a vivir al pueblo donde pasó su infancia la mujer. Una vez instalados, va ocurriendo una serie de sucesos que hace que haya una tensión entre los personajes.
Lo magistral del film es como va poco a poco metiendo tensión y como va generando una incomodidad con la que sientes angustia y te vas metiendo más en la película junto con los personajes. La tensión se palpa en el ambiente, no solo en la gente del pueblo, sino también en la pareja. Es como si se fuera llenando un globo de aire, hasta que revienta.
Todo te empieza a parecer una amenaza y sientes miedo por los personajes. Es absolutamente envolvente. Y esto es algo que sólo un director como Sam Peckinpah podía haber dirigido. La película cuenta con bastante violencia tanto física como psicología que no sólo afecta a los personajes, sino que también al espectador. ¿Violencia gratuita?, pues puede que si, pero muy bien llevada y de la que sino no habría película.
En conclusión, una película muy recomendable, que tiene un remake del año 2011 que no he visto y del que no puedo hablar. Las actuaciones de ambos protagonistas son geniales, y la historia es bastante buena. En fin, si os gusta este tipo de películas de tortura y venganza, este es el origen de todas ellas. Un saludo y hasta la próxima.
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